Aun estando despierto sigo soñando con las imágenes del pasado, rostros, lugares y situaciones que sin querer vuelven a salir de su caja, algunas alegres, el resto demasiado tristes, vivimos en un mundo donde todo el mundo tuene demasiada prisa y nadie vuelve la vista a tras para ver que es lo que le ocurre al vecino, simplemente se sigue el camino, talvez yo me incluya en ese grupo, la desconfianza que crea el haberse roto los esquemas que durante tanto tiempo tenias a bien de llevar contigo, puede que sea la consecuencia de este momento y de la forma que al final decides de llevar hasta el final de tus días, cuándo se pierde la confianza en la gente y hasta puede que en uno mismo, ésta se ve y se orienta de otra forma, posiblemente mas cruel y menos humanitaria que la que tenias antes del cambio.
Por lo que a mi respecta fallaron demasiadas veces, aun así seguí queriendo ver que todo podía ir a mejor y nada a peor, me equivoque, me mintieron, deje que me llevaran al jardín de la infancia y cuando quise darme cuenta fue demasiado tarde, lo perdí todo, todo por lo que había dejado media vida de ilusiones e ideas de futuro para seguir en este mundo lo mas feliz posible, ahora reconozco que todo esto fue una utopia, la felicidad no existe, pase de buscar un caballo cuando te regalan una caja de zapatos con boñigas de caballo, a darme cuenta que todo es mentira, pura palabrería las cuales no tienen sentido alguno, sobre todo cuando las palabras se las lleva el viento y por la boca muere el pez, palabras que solo sirven para regalar un sonido bonito con su pensamiento al oído y a la mente, la realidad cuando abres los ojos es otra muy diferente.
Pero talvez cuando mas daño se hace es cuando quien rompe los esquemas es la persona en la que confías y das tu vida por ella, por la que pones las manos en el fuego aun sabiendo que se esta equivocando, la cual te apuñala por la espalda y de frente, lo ves de venir, pero no haces nada, simplemente dejas que te hieran de muerte y te dejas morir lentamente con tu agonía, intentando aun y todavía, buscar un sentido que no lo tiene, un grano remoto de complicidad para disculpar tan vil acto de traición, te dejas desangrar…….por amor, lealtad y por la vida que hasta ese momento llevas la cual piensas que es la mejor forma de seguir viviendo.
Después de esto llega la caída, una caída que te hace deambular entre la multitud, sin sentido, ves como la vida y alma se te escapa de entre las manos y decides no hacer nada para que no se aleje, simplemente te dejas morir entre la multitud, cada día un poco mas, sin una explicación y si la tiene, no la encuentras, agonizas pero vivo, se escapa el alma y la ves de pasar por tu lado y le preguntas quien eres, sin darle mas importancia que la de saber que ya no volverá a su lugar de origen, pasas de ser alguien a convertirte en un moribundo en vida, a ser un zombi, con la mirada perdida en el espacio y sin menté, solo buscas una explicación.
Siempre se dice que el camino no hay que deshacerlo, que hay que seguir hacia delante, esto es incierto, para volver a encontrar donde te perdiste se debe de volver los pasos a tras y mirar donde perdiste tu dignidad, el honor, la lealtad y las ganas de seguir viviendo, en algún lado del camino se perdió y el seguir para delante lo único que hace es partir sin un trozo de ti demasiado importante como para no buscarlo, púes cuando este se tuerce, lo único que sucede es dar vueltas en el mismo lugar, sin darte cuenta que estas perdido, así que la única opción es parar, mirar y reiniciar el movimiento desandando los pasos que distes si es que deseas encontrar lo que olvidaste en el recorrido, tarea nada fácil, penosa y ardua, y aunque consigas encontrar lo que se perdió, hay algo que no deja de sangrar, tú alma y el corazón.
Me aparte del camino en algún lugar, me perdí, perdí el rumbo, la orientación, y el sentido de la dirección a seguir, ahora, sigo intentado recuperarlo, solo logre encontrar una parte de mí, demasiado tiempo me a costado deshacer el camino andado sin ninguna alegría, ahora vuelvo a reiniciarlo despacio, buscando en cada curva del mismo, en cada recoveco, pero sigo sin rumbo y lo peor de todo es que no me preocupa encontrarlo, cuándo caes, por circunstancias que no son creadas por ti, el levantarse no es tan fácil, porque para ellos debes de encontrar donde estaba el tropiezo, para seguir adelante, decidí volver a la montaña, decidí alejarme del mundanal ruido de la ciudad, del sin sentido de la vida, de las prisas, del que te den…….de la gente que bulle en las urbes, del sexo sin amor, putas las hay en todos los sitios y todas tienen un precio, ya sea un cubata o algunas perras, sin ternura, sin placer de saberte deseado, del cuanto tienes tanto vales, de las miradas por encima del hombro, de los pobres con trajes y corbatas que van de ricos, de las señoras que son mas putas, que las putas las cuales si que son señoras, desde esta montaña, desde la altura, con el aire en la cara y el frío en los huesos, miro a todos con ojos de águila, sin buscar presas, simplemente observo y callo, y cada día estoy mas convencido de que algo me deje en el camino y lo que tengo claro es que no deseo ser como estos que corren en las urbes, sin sentido, en las alturas, desde esta montaña, observo y callo.
Haces llorar el corazón amigo mio, sin lágrimas en los ojos pero si en el sentimiento.
ResponderEliminarEl silencio de los pueblos es un milagro de equilibrio para la mente. En cuanto a la gente que mira por encima del hombro, hum, a mi antes me ocurria igual. Una simple mirada de un determinado estereotipo humano me sacaba de mis casillas. Ya no. Cada uno es cada uno y alla ellos con sus cacaos mentales. Por cierto les miro con la misma mezcla de fascinación y asco que ellos usan para mirar a los otros.Que lo pases bien y cogas aire. Saludos
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